domingo, 8 de marzo de 2015

Última actividad del parcial  Valor 2%
A veces pasamos mucho tiempo leyendo o escuchando a otros que dejamos  de escucharnos a nosotros mismos. En esta semana quise rescatar algunos de sus pensamientos o ideas y compartirlos con el mundo.  La actividad consistirá en comentar algunas de las frases de sus compañeros, que elegí  después de haber hecho un proceso de selección muy riguroso. Esta semana habrá triple bono +2 para el autor de la frase ganadora y +1 para la mejor reflexión. No esta permitido votar por sí mismo. Les pido comentar solo la frase o pensamiento que consideren acreedora del bono para yo poder consignarlo. :) o por lo menos que me aclaren cuál, si comentan más de uno























 

jueves, 5 de marzo de 2015

Jóvenes aprovecho el medio para recordarles que el día martes tenemos el control de lectura de los primeros quince capítulos de Prisión Verde. Les animo a realizar la lectura asignada.
 

lunes, 2 de marzo de 2015

Actividad de la semana Valor 3%
Como les mencioné en el aula su tarea consiste en leer cada una de las fábulas y escribir la enseñanza o moraleja que se trata de transmitir, al igual deben de ayudarme a decidir que equipo hizo la mejor ilustración para el texto asignado. Su comentario debe de incluir ambas cosas.

La zorra y el espino


Una zorra saltaba sobre unos montículos, y estuvo de
pronto a punto de caerse. Y para evitar la caída,
se agarró a un espino, pero sus púas le hirieron
las patas, y sintiendo el dolor que ellas le producían,
le dijo al espino

-- ¡ Acudí a ti por tu ayuda, y más bien me has herido. !

A lo que respondió el espino:
-- ¡Tú tienes la culpa, amiga, por agarrarte a mí, bien sabes lo bueno que soy para enganchar y herir a todo el mundo, y tú no eres la excepción!
 


El perro y su reflejo en el río.


Vadeaba un perro un río llevando en su hocico un sabroso pedazo de carne. Vio su propio reflejo en el agua del río y creyó que aquel reflejo era en realidad otro perro que llevaba un trozo de carne mayor que el suyo.

Y deseando adueñarse del
pedazo ajeno, soltó el suyo para
arrebatar el trozo a su supuesto compadre.

Pero el resultado fue que se quedó sin el propio y sin el ajeno:
éste porque no existía, sólo era un reflejo, y el otro, el verdadero, porque se lo llevó la corriente.


Las moscas.


De un panal se derramó su deliciosa miel, y las moscas
acudieron ansiosas a devorarla. Y era tan dulce que no
podían dejarla. Pero sus patas se fueron prendiendo en la
miel y no pudieron alzar el vuelo de nuevo. Ya a punto
de ahogarse en su tesoro, exclamaron:
 
-- ¡Nos morimos, desgraciadas nosotras, por quererlo tomar
todo en un instante de placer!
 
 
 
 

El labrador y la víbora.


Llegado el invierno, un labrador encontró una víbora
helada de frío. Apiadado de ella, la recogió y la guardó en
su pecho. Reanimada por el calor, la víbora, recobró sus
sentidos y mató a su bienhechor, el cual, sintiéndose
morir, exclamó:

-¡Bien me lo merezco por haberme compadecido de un ser malvado!

 
 

Los jóvenes y las ranas.

Varios jóvenes, jugando cerca de un estanque, vieron un grupo de ranas en el agua y comenzaron a apedrearlas.
Habían matado a varias, cuando una de las ranas, sacando su cabeza gritó:
- Por favor, paren muchachos, que lo que es diversión
para ustedes, es muerte y tristeza para nosotras.

La cabra y el cabrero.

 
Llamaba un cabrero a sus cabras para llevarlas al establo.
 
Una de ellas, al pasar por un rico pasto se detuvo, y el cabrero le lanzó una piedra, pero con tan mala suerte que le rompió un cuerno. Entonces el cabrero le suplicó a la cabra que no se lo contara al patrón, a lo que la cabra respondió:
 
-- ¡Quisiera yo quedarme callada, mas no podría! ¡Bien claro está a la vista mi cuerno roto!.